Mi diario, mi terapia

 Nada nuevo que contar, solo la misma mierda de siempre. Nada nuevo que haga es importante o interesante. Así que lo correcto es amoldarse a una aburrida rutina que no destaca para nada y si no hay nada nuevo que contar tampoco me tengo que preocupar por sufrir porque nadie le interese lo que me pase. Creo que lo más emocionante de mi vida actualmente sería mi repentina muerte, pero eso no va a pasar de momento, o eso es lo que me dice la intuición. Todo es plano, igual, monótono, nada tiene color ni sabor. Es realmente gris, neutro y soso. Fluyamos con la monotonía de la sociedad.

 Un mes para que cumpla un año más. No me apetece celebrar nada Nunca me gustó mucho mi cumpleaños y hubo un tiempo en que lo odiaba ya que apenas días antes era el de mi abuela que murió. Así que mi cumpleaños parecía bien triste para todos. Me cansé, si ya no me gustaba, aún menos después de eso. Siempre eran sonrisas forzadas, regalos por compromiso y una brutal indiferencia. Creo que se me ha pegado, me da asco mi cumple y tampoco siento especial ilusión por celebrar el del resto. No quiero nada y al final solo lo empiezo a odiar de nuevo como en el pasado. No lo quiero. Es un día agotador, tener que sonreír demasiado me cansa. No quiero. Solo deseo estar perdida en algún lado donde nadie me encuentre y sin móvil para que mis primas no me tengan que llamar, de nuevo por compromiso, como todos los años para cantarme el cumpleaños feliz que no les apetece cantar. Ni tampoco me apetece recibir regalos por el mero compromiso de "ser de sangre". Simplemente no quiero nada porq...